Puede ser incómodo hablar de finanzas al planear una boda, pero es crucial que estas cosas se aborden. Ambos traen al matrimonio sus hábitos de gasto, sus expectativas y sus deudas. Mientras que la deuda prematrimonial no se convierte en responsabilidad del otro cónyuge, las deudas post matrimoniales sí lo hacen. Y una discusión honesta sobre el gasto responsable, la división de las cargas financieras, el trabajo / la carrera y otros recursos antes de la boda puede ahorrar una gran angustia después.
En un artículo de Casey Bond, se discuten varios escenarios que una pareja puede encontrar con respecto a la deuda y las finanzas, junto con las medidas que puede tomar para proteger cada uno de sus puntajes de crédito. Para leer más, vaya a: https://www.huffpost.com/entry/marrying-someone-with-debt_n_5bad16f1e4b0b4d308d0df10
